Rusia ha anunciado recientemente que dejará de proporcionar gas a Europa a mediados del mes de octubre. Esta decisión afecta en gran medida al continente y por ello, los países europeos se han visto obligados a replantear su estructura de abastecimiento con el objetivo de subsistir este invierno. Según nuestro CEO y experto en energía Diego Mateos, nos encontramos en una situación difícil de gestionar.
En relación al abastecimiento de esta materia prima, Diego ha declarado que “Europa ha llenado sus reservas de gas, estamos superando el 80% de media y eso ha hecho que en verano se haya tensionado bastante su precio.” Como consecuencia de esta subida, habrá una gran reducción de la demanda que tendrá efectos notables para los consumidores de energía, como son por ejemplo las grandes empresas, que dejarán de producir por la poca rentabilidad que tendrán.
Respecto a la futura gestión de las reservas tanto españolas como europeas, nuestro experto ha indicado que el país cuenta con las infraestructuras adecuadas, pero no dispone de gas. En cuanto a Europa, no tiene ninguno de estos dos elementos esenciales y por ello, el depósito que le queda al continente es un máximo de 3 meses.
Nueva reforma del mercado eléctrico
Debido a la nueva medida adoptada por Rusia, Diego ha aclarado que la reforma eléctrica gestionada por Europa tendrá dos fases, la primera de ellas a corto plazo. Esta etapa tiene el fin de topar el gas con el modelo que hemos tenido en España e irá seguida de una segunda fase más importante que tendrá lugar dentro de unos meses. Respecto a las negociaciones entre los países europeos, nuestro director opina que “no es una medida muy acertada. Lo que vayan a consensuar va a ser complicado porque depende del mix energético que tengas como país, tu coste va a ser uno u otro.”
Además, no coincide con la idea de topar las energías renovables para después, introducir el gas. Otros de los factores que afectan negativamente a esta situación son las interconexiones que complicarán las negociaciones de aquí a diciembre y harán que no se llegue a ningún acuerdo.