Con la llegada de septiembre, se inicia un período crucial para las empresas en cuanto a la gestión de energía se refiere. Las auditorías energéticas cobran especial relevancia, ya que algunas empresas aún no han realizado esta evaluación fundamental, mientras que otras se enfrentan a la necesidad de renovarla.
Auditorías energéticas obligatorias
¡No dejes pasar la fecha límite!
Realización o renovación de auditorías energéticas
Es importante recordar a las empresas cuyas auditorías energéticas han caducado que deben renovarlas sin demora. La renovación oportuna garantiza la continuidad en el cumplimiento normativo y permite mantener los beneficios obtenidos a través de la mejora de la eficiencia energética. Dejar pasar la fecha límite podría exponer a la empresa a sanciones innecesarias y a la pérdida de oportunidades para ahorrar costes y reducir su impacto ambiental.
¿Qué son las auditorías energéticas?
Las auditorías energéticas son evaluaciones exhaustivas y sistemáticas del consumo energético de una empresa. Su objetivo es identificar oportunidades de mejora en la eficiencia energética, lo que a su vez puede reducir los costes operativos y la huella ambiental de la organización.
Estas auditorías analizan desde los procesos internos hasta los equipos utilizados, con el propósito de descubrir áreas donde se puede optimizar el uso de la energía. Según el Real Decreto 56/2016 las grandes empresas tienen la obligación de realizar auditorías energéticas cada 4 años.
De esta manera, el Real Decreto establece que están sujetas a la obligación de llevar a cabo una auditoría energética aquellas empresas que cumplan cualquiera de los siguientes criterios:
Empresas con un mínimo de 250 empleados
Empresas con un volumen de negocio mayor a 50 millones de euros y, a su vez, un balance general superior a 43 millones de euros.
Grupos de sociedades con la condición de gran empresa
Es importante destacar que las pequeñas y medianas empresas (PYMES), así como las microempresas, están exentas de esta obligación. Sin embargo, se recomienda que lleven a cabo auditorías energéticas en sus empresas.
Sanciones por no realizar auditorías energéticas
El incumplimiento de las regulaciones relacionadas con las auditorías energéticas puede acarrear sanciones significativas para las empresas. Estas sanciones varían según la jurisdicción y la magnitud del incumplimiento, oscilando entre los 300 euros, para infracciones leves, hasta 60.000€ para infracciones muy graves. Además del impacto financiero, el incumplimiento puede afectar negativamente la reputación y la imagen corporativa.
SANCIONES DE HASTA 60.000€
La no realización de la auditoría energética o el incumplimiento de los requisitos mínimos supone una infracción muy grave, con multas de hasta 60.000€
De acuerdo con lo estipulado en la Ley 8/2014, de 15 de octubre, las sanciones asociadas a infracciones en materia de auditorías energéticas, la acreditación de proveedores de servicios y auditores energéticos, así como la promoción de la eficiencia en el suministro de energía y la contabilización de consumos energéticos, serán aplicadas con base en los siguientes rangos:
Infracciones leves
- Falta de comunicación de la auditoría al órgano competente para su registro.
- Incumplimiento de deberes y obligaciones en auditorías energéticas y acreditación, sin ser grave o muy grave.
Infracciones graves
- Auditoría energética que no cumple con los criterios mínimos legales.
- Omisión de análisis de costes y beneficios en promoción de eficiencia energética.
- No instalación de contadores individuales o alternativas viables.
- Ejercicio de actividad de proveedor o auditor sin cumplir requisitos legales.
Infracciones muy graves
- No realizar la auditoría en el plazo establecido.
- Acreditación con documentos falsos como proveedor o auditor.
- Incumplimiento de mantener seguro de responsabilidad civil o garantía financiera.
Ventajas de realizar auditorías energéticas
La realización de auditorías energéticas supone para las empresas una serie de ventajas significativas que van más allá de la cumplimentación de los requisitos normativos. Estas evaluaciones exhaustivas ofrecen una visión profunda y sistemática del consumo energético de una organización, abriendo la puerta a una serie de oportunidades estratégicas y operativas que pueden redefinir la eficiencia y sostenibilidad del negocio.
Ahorro de costes. Identificar ineficiencias energéticas permite implementar cambios que reduzcan los gastos operativos relacionados con la energía, lo que mejora la rentabilidad y eleva la competitividad.
Identificación de irregularidades en las instalaciones. Con el fin de optimizar los gastos energéticos. Proporciona un análisis exhaustivo del consumo energético en todas las áreas de la compañía, lo que permite proponer soluciones innovadoras para reducir la demanda de energía.
Mejora de la imagen corporativa. Las empresas comprometidas con la eficiencia energética y la sostenibilidad suelen ser vistas de manera más favorable por sus clientes y la sociedad en general.
Responsabilidad ambiental. La reducción del consumo energético contribuye a disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero, lo que es vital para enfrentar el cambio climático.
Identificación de inversiones rentables. Exploración de enfoques novedosos para disminuir el uso de energía, como la integración de dispositivos y sistemas con componentes diseñados para la eficiencia energética y la capacidad de respuesta inteligente.
Emisión del certificado energético y cumplimiento normativo. Las auditorías son obligatorias para ciertas empresas. Además, la inversión realizada se amortizará con el tiempo mediante el ahorro en las facturas de energía.