El precio del petróleo ha alcanzado niveles récord tras el reciente atentado en Irán, llegando a los 89$/barril, con proyecciones que sugieren un aumento incluso por encima de los 95$. En una entrevista exclusiva con Negocios TV, Diego Mateos, CEO de GESE, advierte sobre las implicaciones globales de este aumento y su impacto en la eficiencia energética.
La tensión política en la OPEP+ y los conflictos geopolíticos han desencadenado una especulación sin precedentes en el mercado del petróleo. Arabia Saudí y Rusia continúan defendiendo los recortes de producción, pero el temor a futuros conflictos mantiene a los inversores en vilo. Diego Mateos destaca cómo estos eventos afectan a la estabilidad económica mundial, recordando que en un mundo tan interconectado, los conflictos políticos tienen repercusiones en todos los sectores.
¿Subirá aún más el precio del barril?
La situación se complica aún más con la perspectiva de la reunión de la OPEP+ en Viena. A pesar de los esfuerzos por mantener la estabilidad, la falta de cumplimiento de las expectativas ha generado incertidumbre. Los inventarios se reducen mientras la demanda sigue en aumento, lo que sugiere que el precio del barril podría superar los 100$.
Además, un informe de Wood Mackenzie revela que las refinerías europeas podrían cerrar hasta 4 millones de barriles diarios de capacidad debido a las políticas de transición energética. Este fenómeno amenaza la competitividad y subraya la importancia de las inversiones en eficiencia energética.
En este contexto, GESE reafirma su compromiso con la auditoría energética como herramienta para optimizar el consumo y reducir costos. Con la volatilidad del mercado del petróleo en aumento, las empresas necesitan más que nunca soluciones eficientes y sostenibles. La transición hacia fuentes de energía renovable y la mejora de la eficiencia se vuelven imperativas para mantener la competitividad en un entorno económico cada vez más desafiante.
Diego Mateos concluye que la incertidumbre en el mercado del petróleo destaca la importancia de diversificar las fuentes de energía y adoptar prácticas más sostenibles. En un mundo donde la estabilidad energética es vital, la eficiencia energética se erige como un pilar fundamental para asegurar un futuro más seguro y sostenible para todos.